Norena repitió su gesta de La Llorea y lo volvió a hacer en León: ganó la clasificación hándicap y el scratch. Un -2 final (en realidad +2, porque jugó con hándicap 4 – ¡cuánto hacía que no sentía esa sensación de seguridad por tan pequeño margen!-) le dio el triunfo, como en Gijón, sobre un Dr. Swing que, desde su abultado y “atechado” hándicap actual (+12 en León -¡qué vergüenza!, como diría el propio Dr hace tan sólo unos meses-), la sigue pero no la consigue: segundo en La Llorea, en Las Caldas (este más doloroso, porque perder con Norena es un mérito, pero hacerlo con Karim….) y en León… Y, al margen del magisterio de nuestra campeona, otra gran sorpresa en León: el descalabro de un Héctor que persiguió la L con extraña fruición aunque, por momentos, pareciera que luchaba por evitar tan amargo trago para los novatos en esta distinción. Al final consiguió que ni Florez ni Choni le alcanzaran en la batalla por el premio.
Golf León recibió a la PGASTUR como siempre: en buen estado, más largo que nunca, con un rough imposible en algunos hoyos y con unos greens engañosos, con una velocidad aleatoria que casi condujo a la ruina golfística a Borja (incapaz de interpretar la fuerza necesaria para meter un put de un metro: cuando no se quedaba corto se pasaba metro y medio) y al Coyote (+8 en el hoyo 18…). Tiempo destemplado, más bien frío que calor, viento y un aire díscolo que hizo sufrir a todos los competidores menos a Karim, que tiró más que nunca de sus “rabazos” misil tierra-tierra para disfrazar un penoso día de golf.
Norena estuvo desde el inicio en posiciones de cabeza, aunque primero Jorge M y, luego, el Dr Swing y el Jaba –cada vez menos suido y más dócil- estuvieron compitiendo por la primera posición con opciones de triunfo. Al final, Jaime pinchó en su último hoyo y le cedió la segunda posición al Chato, el capitán –Coyote mediante- del ejercito de “arronchaos y alicataos” de nuestra peña. Nuestra campeona hizo una gran vuelta y superó el cansancio de sus últimos torneos internacionales y nacionales en Bélgica y en España para dar su mejor versión con la compañía y el cariño de un excelente caddy, su padre, que la hace dar lo mejor de sí. ¡Bravo por los dos!
Pero como en esta Peña abundan los “liantes”, la noticia del día más celebrada no fue el indiscutible triunfo de Norena, sino el descalabro de un Héctor que sufrió un impensable, sorpresivo y alucinante traspiés golfístico. Desde el primer hoyo quedó claro que no era su día. Acabó la primera vuelta (salió por el 10) con +13 y lo mejoró en la segunda vuelta: +16. Al final, un lapidario +29 (111 golpes) que no debió hacer ni el primer día que estrenó hándicap. Lo cierto es que no jugó bien, pero la presión de la L (se pasó media competición pendiente de si iba el último o no) le pudo y le llevó a cometer errores imposibles de entender en él, como los cinco golpes finales en el bunker del 9, bordeando el Green por la arena…. Un mal día de golf que le va dar una gran enseñanza: la L no es un castigo, es una lección de vida…
Por lo demás, pocas sorpresas en León: Doc sigue en su posición habitual, siempre al acecho; George se mantiene en cabeza pese a sus lesiones; Sergio mantiene su diente de sierra, hoy arriba y mañana abajo; Muilito, como Rahm, va poco a poco subiendo peldaños; el presidente corrupto no acaba de despegar aunque al final ganará la Orden de Mérito como es su costumbre; Gerardo parece que va a armarla pero se desvanece al final; Dover sufrió su pájara habitual en un torneo; Postigo no remonta; Toño Coya no acaba de garantizar su puesto en la ryder; el Cardenal continúa con sus problemas con Echenique; Marino no pierde ocasión para disfrazar su verdadero hándicap; Flórez sigue con sus problemas para ajustar su perspectiva golfística al ritmo de juego; Choni mantiene su tendencia a jugar al límite con Flórez; y Ángeles mantiene su entrega a esta peña que tanto bien nos hace a todos.
En León volvieron a participar las dos novatas, Gemma Triay y Belén Sörestam. Las primera, competitiva hasta la extenuación, se lamentaba al final de la mañana de haber hecho dos golpes más (13) que TigerGus, que tampoco tuvo precisamente su día. Y la segunda, sigue su aprendizaje celebrando que no quedó en posición de llevar la L… Y en León, como siempre, también estuvo Andrea, recogiendo en imágenes la vida de la peña, y que fue distinguida, por sus grandes méritos como alma de este grupo, en la entrega final de premios.
La vida sigue y Villaviciosa espera a los peñistas para ir clarificando la composición de la Orden de Mérito final. A ver qué sorpresas nos aguardan en la Villa…